Y no sólo eso: para sacar fondos, también vende lotería y cosméticos. La historia de María Luisa no es un caso excepcional; por ejemplo, el doctor Mario Cordero, que está investigando la fibromialgia en la Universidad de Sevilla con resultados mundialmente relevantes, se mantiene a duras penas gracias a las rifas y las tómbolas que organizan los enfermos para encontrarle dinero. De seguir así, dentro de poco todos los feriantes que venden camisetas y calcetines en los mercadillos serán probablemente científicos en busca de fondos.